Las hepatitis víricas constituyen un importante problema mundial de salud y exigen una respuesta urgente. A finales de 2015 había aproximadamente 325 millones de personas con hepatitis crónicas y muy pocas de las personas infectadas tuvieron acceso a pruebas y tratamiento, especialmente en los países de ingresos bajos y medianos.
Con el lema “Eliminar la Hepatitis”, la OMS pone en marcha una serie de actividades e iniciativas de sensibilización en torno al Día Mundial contra la Hepatitis 2017, que tienen por objeto:
– Potenciar y aprovechar el compromiso político tras el refrendo oficial de la Estrategia mundial del sector de la salud contra las hepatitis víricas en la Asamblea Mundial de la Salud de 2016.
– Dar a conocer las respuestas nacionales a la hepatitis que se están empezando a utilizar en países con una carga elevada de esta enfermedad.
– Alentar la acción y la colaboración de personas, asociados y el público en general.
Conseguir eliminar las hepatitis en 2030 no es un objetivo excesivamente ambicioso; los informes de 28 países con una elevada carga de la enfermedad alientan el optimismo. Las metas de alcance mundial para 2030 son las siguientes: el 90% de las personas con infecciones por el VHB y el VHC se habrán sometido a pruebas de detección y el 80% de los pacientes con las condiciones adecuadas habrán recibido tratamiento.