La leucemia mieloide aguda (LMA) es el tipo más común de leucemia en adultos. Se caracteriza por la expansión patológica de células inmaduras (mieloblastos) que invaden la médula ósea y se expanden hacia la sangre, afectando la producción del resto de las células sanas.
Aunque los pacientes con LMA generalmente responden bien a los tratamientos basados en quimioterapia, gran parte de ellos eventualmente recaen o muestran resistencia a estos procedimientos. La causa de la recaída o la resistencia al tratamiento a veces se debe a la existencia de células madre leucémicas capaces de comenzar de nuevo el cáncer y, a su vez, de ser resistentes a la quimioterapia. Sin embargo, identificarlos es un desafío ya que no hay marcadores específicos para detectarlas y aislarlas.
Los científicos del Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras (Badalona, España) y sus colegas, llevaron a cabo un estudio prospectivo de cohorte en el hospital que incluyó a 43 pacientes recién diagnosticados con leucemia mieloide aguda. Hubo 30 hombres y 13 mujeres; con una mediana de edad de 63 años (rango 26-91) en la cohorte de estudio. A un total de 12 de los 43 pacientes les realizaron un trasplante alogénico de células madre (ASCT) después de la quimioterapia.