Andalucía ha realizado, por primera vez en España, un trasplante de piel humana con las propias células del paciente quemado. En concreto, este trasplante se ha producido con piel fabricada por ingeniería de tejidos con las propias células de la paciente.
Bajo la coordinación de la Iniciativa Andaluza en Terapias Avanzadas, los equipos del Departamento de Histología de la Universidad de Granada, la Unidad de Producción Celular e Ingeniería Tisular del Complejo Hospitalario de Granada y la Unidad de Gestión Clínica de Cirugía Plástica y Grandes Quemados del Hospital Virgen del Rocío han trabajado durante los últimos años para hacer una realidad esta intervención, que ha permitido acelerar la regeneración de la piel y contribuir a la supervivencia de la paciente.
La novedad de este modelo de piel radica en dos elementos. Por un lado, se ha realizado con una nueva fórmula, incorporando en su fabricación agarosa –una sustancia química extraída de un alga marina no usada hasta ahora en cultivos de piel–, lo que ha resultado crucial para el manejo clínico de la misma, mejorando su capacidad de adhesión y de sutura. Por otro, se ha empleado nanoestructuración por presión, lo que ha mejorado las propiedades relacionadas con la capacidad de deformación de la piel para adaptarse con la máxima precisión a la superficie sobre la que se aplica.